Es difícil hilvanar y parafrasear hurgando en el recuerdo las frases que permitan expresar el gran aprecio, cariño y especial respeto a un hombre que ayudó al desarrollo de Zamora.
Don Moisés Armijos Ordóñez, nace en Loja el 8 de marzo de 1924, sus padres el Sr. Antonio Armijos y Griselda Ordóñez, es el quinto hermano de nueve hermanos.
A los 12 años inicia su labor en el campo como agricultor para apoyar a su padre con la gran responsabilidad de sacar adelante a su familia, a muy corta edad de enfrentar las limitaciones de la vida haciendo del trabajo una vocación única.
En 1938, a sus 17 años de edad va a cumplir su labor con las fuerzas armadas como conscripto.
En 1940 emprende su camino al Oriente en busca de mejorar su vida, donde da sus inicios como el gran carpintero que apoyaba a sus amigos en la construcción.
En 1951, ya de 27 años contrae matrimonio con Leopoldina Rosaura Buitrón Morales y fruto de su amor tiene 7 hijos: Teresa Eugenia, Telmo Arturo, Rodrigo Heriberto, Jaime Alfonso, Doris Alicia, Luz María y Edgar Antonio. 28 nietos, 32 bisnietos y 3 tataranietos.
Se hace amigo de muchas personas como: Celestino Márquez y familia, Vidal Reyes y familia, Víctor Japa y familia, Lauriano Morales y familia, José Tapia y familia, Adolfo Rodas, Víctor, Mateo Santórum, Familia Orellana, Familia Ordóñez, Familia Tuza, Familia Arévalo, Modesto Jiménez y muchas más que por su edad no recuerda.
Se unieron para trabajar y ordenar la cuidad, es así que participa en las elecciones para el municipio de Zamora donde fue alcalde el Sr. Juan Izquierdo y concejales: Moisés Armijos, Adolfo Rodas, y otros.
En el segundo periodo es alcalde el Sr. Víctor Reyes, siendo también don Moisés, concejal.
Lo que hicieron fue trabajar en la construcción de caminos en los barrios a base de mingas y sin ningún gasto económico porque en esa época nadie colaboraba, ni concejales, ni alcalde y tampoco había vehículos, sólo era a pie y con mucho lodo. Ordenar la ciudad con la formación de calles como la que hoy es Diego de Vaca. Con excavaciones a base de pulso, acometido de agua igual a base de mingas y pura. fuerza del hombre.
Instalaciones de luz la primera se hizo hidráulica trayendo el agua desde El Limón, la que duró poco tiempo; luego reunieron algunas cuotas con los que habitaban en Zamora y compraron un motor de luz en Loja que lo trajeron en 6 días al hombro entre 20 habitantes; ya en Zamora el Sr. José Tapia fue quien lo manejaba.
Necesitaban pagar lo que hoy es el Banco de la Vivienda, barrio Yaguarzongo con sus gestiones lograron adquirir el cable para un puente sobre el río Zamora desde Loja, pudieron traer el cable en mulas haciendo rollos y ubicando acémilas una tras otra porque el cable no se podía cortar, llegaron a Zamora en 12 días y lo demás lo hicieron a base de mingas.
Había la necesidad de construir la iglesia siendo él la persona que inició la construcción, claro con ayuda de personas interesadas en el adelanto de nuestra Zamora, es aquí donde llegaron a saber que llegaba un sacerdote y él fue a su encuentro y en el Río San Francisco, donde hoy es el centro. Me encuentro con Monseñor Jorge Mosquera, llegaron a Zamora y sus habitantes a su llegado, lo recibieron con bombos y platillos por la alegría de tener un siervo de Dios. Con Monseñor Jorge Mosquera siguieron la construcción de la iglesia y luego del hospital Julius Doepfner donde también puso su contingente.
Su pedido es que se construya un monumento en homenaje a Monseñor Jorge Mosquera y se lo coloque en el parque central de la ciudad de Zamora.
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